FORD MUSTANG 1994

Cuando Ford presentó al Mustang, este era parte de un libreto que proponía usar los chasis y motores en varios modelos y donde cada nueva generación aumentaba de tamaño, de modo que los fabricantes obtuvieran mayor ganancia.
En la década del 70, el embargo petrolero de los países árabes, puso al mundo de cabeza y agarró a los fabricantes de autos americanos con los pantalones abajo, con lo que de la noche a la mañana el Mustang dejó de ser un auto grande para convertirse en uno muy pequeño, que usaba los componentes del Pinto, el auto más económico que hacía Ford. Los aficionados al Mustang protestaron, pero a pesar de esto el auto se vendió muy bien. En 1979, Ford lanzaba una nueva plataforma a la que llamaba “Fox” y sobre ella hacía el nuevo Mustang y varios otros modelos. El auto era más grande que el anterior Mustang, pero más pequeño que los antecesores a ese. Un tamaño que concordaba con los estándares de esos años, de ni tan pequeño como los de la crisis ni tan grande como los dinosaurios del pasado. A Ford le fue muy bien con ese Mustang y por 15 años lo mantuvo en producción, vendiendo un total de 2.5 millones.
Su reemplazo se lanzaba en diciembre de 1993 con el código interno SN-95 y como parte del libreto que Ford, y sus competidores locales seguían usando, estaba montado sobre una plataforma “Fox” actualizada.
El equipo de diseño bajo la batuta de Bud Magaldi, fue el encargado de desarrollar una carrocería, que eliminó el estilo “hatchback” de la versión anterior y dejó un coupé y un convertible. Magaldi trabajó con la base de datos reunida por el Jefe de la División de Compactos y Utilitarios de Ford, William Boddie, que entrevistó a 200 usuarios del Mustang y creó un diseño moderno con base a esas preferencias.
El interior también adoptaba las tendencias de moda en ese momento con un habitáculo donde la consola dividía las plazas delanteras, que parecían encapsuladas en su puesto, mientras el tablero se prolongaba hasta la tapicería de las puertas. La instrumentación estaba frente al conductor y constaba de dos grandes relojes flanqueados por cuatro más pequeños.
Parte del éxito del Mustang “Fox” fue la gran cantidad de accesorios “aftermarket” que se conseguían, por lo que Ford empezó a ofrecer mucho equipo opcional en el siguiente Mustang, algunos de ellos en forma de paquete. Uno de ellos el GT, incluía el motor 302 o 5.0 con 215 HP y doble escape, una suspensión más rígida, un diferencial corto, para mayor aceleración, y rines de 16 pulgadas, en vez de los 15 del modelo base. Para el GT se tenían dos transmisiones, una automática de 4 velocidades o una manual Tremec de 5 velocidades, que tiene el auto de prueba.
Ya para 1994, una serie de elementos de seguridad eran obligatorios, por ello el Mustang venia de fábrica con control electrónico de estabilidad, lo que le confería mucha seguridad sobre mojado, algo que su antecesor no tenía y que causó muchos accidentes por la facilidad de su cola en tratar de ir por delante del frente. Tenía además control de tracción, frenos de disco con ABS y dos bolsas de aire.
No era competencia en cuanto a prestaciones, con sus rivales europeos, pero a un precio más económico que esos, tenía buenas prestaciones, con un 0-100 km/h de 6.8 segundos y una velocidad máxima de 220 km/h.
Su manejo era una mejora contra su antecesor, pero el eje rígido trasero continuaba siendo su punto débil, sobre todo cuando se circulaba por una carretera ondulada o en mal estado. A velocidad de autopista el auto era mucho más silencioso y sobre carreteras con curvas, el chasis más rígido y la suspensión más dura permitían ir bastante más rápido, en forma segura.
Tras dos años en el mercado, Ford decidía hacer unos cambios, externos, internos y de motorización y aparecía la quinta generación o S197, mucho más popular en su momento, que la SN-95.
ESTE GT
La Federación Internacional de Vehículos Antiguos (FIVA) cataloga a un auto de 25 años o más como de colección, por lo que este Mustang GT ya entra en esa categoría y es un auto apreciado por los aficionados que buscan un vehículo con buenas prestaciones, un consumo contenido y a un buen precio. Es también un auto fácilmente restaurable ya que para la parte mecánica hay muchos suplidores tanto de partes originales como para mejorar sus prestaciones.
Este GT fue vendido originalmente por Motores Colpan, en Panamá. El dueño original lo usó un tiempo pero sufrió un problema en la rodilla y dejó de usarlo, guardándose en un local bajo techo, por eso solo tiene 16,770 kilómetros. Cuando el dueño falleció, el carro pasó a sus herederos quienes lo vendieron, hace dos años, a su propietario actual, quien lo repintó completamente, en el color de fábrica y le arregló o cambio las partes que mostraban desgaste, dejándolo nuevamente en el estado original.