YAMAHA EXPLORA NUEVAS OPORTUNIDADES DE MOVILIDAD

No es un carrito de golf, sino un auto urbano para cortas distancias.
Yamaha ha empezado a probar este concepto de vehículo movido por una celda de combustible y destinado a ser un vehículo compartido. Las pruebas se están efectuando a partir de este mes en Wajima, Japón, para recorridos en el centro de la ciudad, hasta un máximo de 3 kilómetros.
Comparado con otros vehículos eléctricos de movilidad publica personal de tamaño similar, este prototipo tiene ventajas en cuanto al rango de uso además de una recarga en menor tiempo, lo que permitirá tener una operación con menos vehículos para la misma infraestructura de recarga.
El vehículo, que por ahora tiene el nombre YG-M FC, es parte de una iniciativa de cumplir con la propuesta del gobierno japonés de promover una estrategia de vehículos que funcionen con hidrógeno y estaciones de carga de ese mismo elemento. Con esta iniciativa el gobierno de Japón quiere reducir las emisiones contaminantes en un 50 por ciento y la dependencia del petróleo u otros recursos perecederos, puesto que Japón carece de yacimientos de petróleo y una infraestructura hídrica, poco apta para la generación de energía a gran escala. El plan trazado tiene como meta 2050, pero muchas empresas ya han empezado a trabajar de lleno en ese plan.
Sobre el vehículo en si, Yamaha ha dado pocos datos aparte de sus dimensiones (largo 3.37 metros, ancho 1.34 metros y un peso de 640 kilos) y de que utiliza un motor movido por hidrogeno comprimido, sin entrar en más detalles, probablemente esperando los resultados de sus primeras pruebas y su presentación oficial en el Automotive Engineering Exposition, el 22 de mayo en Yokohama, Japón.