BMW 325i, 1994 UN AUTO CONFIABLE

La tercera generación del Serie 3 no cuenta con los seguidores de las dos primeras, pero se está ganado a pulso un lugar entre los aficionados a los autos antiguos.
Después del éxito que supuso el lanzamiento de la Serie 3, en 1975 y de su sucesor, el E30 en 1982, se querían corregir una serie de elementos de los que se quejaban los clientes, entre los que destacaba el poco espacio interior, por eso cuando aparecía la tercera generación, conocida por el código interno E36, se trataba de un auto más grande con una mayor distancia entre ejes.
En octubre de 1990, se presentaba en el Circuit de Miramas en Francia, como un sedán de 4 puertas, al que posteriormente se le incluirían una versión camioneta, una convertible y un coupé de dos puertas en 1992.
La carrocería suponía un adelanto con respecto a su antecesor en términos aerodinámicos, con una serie de elementos que le permitían un coeficiente aerodinámico de 0.29, una cifra que aun actualmente es buena.
Al ser más grande que su predecesor, era también más pesado, básicamente porque incluía muchos elementos de seguridad pasiva, pero aun así se beneficiaba de una mayor velocidad punta y una comodidad que envidiaban los propietarios del anterior modelo.
Los aficionados a las prestaciones y al comportamiento dinámico, alabaron la nueva suspensión trasera de brazos múltiples, su balance de pesos 50:50 y el hecho de que todas las versiones dispusieran de frenos con ABS, toda una novedad en su segmento.
Aunque estéticamente el sedán y el coupé, se parecían mucho, era pocos los elementos de carrocería que compartían, pues la inclinación de los postes delantero y trasero eran más pronunciados en el coupé, por tanto el techo era más bajo y corto.
Se ofrecía con toda una gama de motores, que en el coupé arrancaban con el M40, de 4 cilindros , 1796 cc y 113 HP, pasando por un dos litros de 6 cilindros y 150 HP y coronando con el 325i con 2,494 cc y 170 HP. En todos los casos se disponía de una transmisión manual de 5 velocidades o una automática también de 5 velocidades, que movían las ruedas traseras.
A partir de 1993 el motor del 325i, incorporaba el sistema de regulación variable de ángulo de los árboles de levas, que en BMW se conocía como VANOS. Esa mejora subía la potencia a 192 HP, con lo que el tiempo en el 0-100 km/h pasaba a los 8.0 segundos, mientras la velocidad máxima era de 233 km/h.
Mientras la carrocería del sedán casi no compartía piezas con el coupé, no ocurría lo mismo en el interior, donde todo era común, empezando por el tablero que parecía rodear al conductor y siguiendo con los asientos, aunque muchos de los coupé, especialmente los equipados con el motor de 2.5 y 2.8 litros tenían los asientos deportivos, que se ofrecían como opción en los sedanes.
Debido a normas alemanas, el E36 debía tener un cierto porcentaje de partes reciclables o de material reciclado y la mayoría fueron piezas del interior, con lo que con los años los problemas principales aparecieron en la tapicería y en muchas piezas de plástico, lo que hace difícil la conservación de este modelo.
OLGA
El auto que les presentamos, vive desde 1998 en Santiago y su propietario aparece en los papeles como su primer comprador, por lo que podría decirse que él ha sido el único dueño del auto.
En 1998 en un viaje a Panamá, visitó el área de autos usados de Bavarian Motors con la intención de comprar un M3, que tenían en venta. Tras una inspección minuciosa se dio cuenta que el auto había sido chocado y reparado, por lo que desistió de la compra. El vendedor, para no perder la venta, le ofreció a Olga (así llama su propietario a este auto). Inicialmente como el auto no tenía placa, pensó que era nuevo y no le puso atención, pero luego otro de los vendedores, familiar del dueño, lo llameo para darle un precio y contarle la historia del auto. Al parecer el auto llegó a Panamá y por alguna razón o no se incluyó en el sistema o por error lo borraron de él. El hecho fue que el auto se quedó en el recinto aduanero y se olvidaron de él. Tiempo después, se dieron cuenta del error y lo nacionalizaron, pero el auto ya no era del año y por ello primero lo tuvieron como auto de demostración, para que los clientes lo probaran y luego lo uso el gerente como su auto personal.
Con un precio a la mitad de lo que costaba un 325i del año y con solo 1,240 kilómetros acumulados, la oferta fue aceptada. Sin embargo, ya el distribuidor se había comprometido con un piloto de Copa al que se le habían ofrecido unos días de plazo para que consiguiera el financiamiento. Pasado el plazo y en vista de que no había podido completar el trámite, el auto fue vendido a su actual propietario, quien lo ha conservado hasta la fecha, primero como su auto de diario y luego como parte de su colección de autos.
Nos cuenta, que ha sido muy riguroso con los mantenimientos y que siempre ha llevado el auto al distribuidor en Panamá y que aparte de los mantenimientos regulares, se le ha hecho poco al auto, aunque en varias ocasiones ha debido cambiarle el cielo raso, ya que se despega del techo y bastantes piezas del interior han sido reemplazadas por desgaste. Nos cuenta que por primera vez, el año pasado le cambió el embrague y que jamás ha sido chocado, por lo que conserva la pintura original de fábrica.
Los únicos cambios hechos, han sido los rines, que se cambiaron hace unos 20 años, por un tema estético y la suspensión, que hace unos años se cambio por la deportiva que ofrecía como opción BMW.
Comprobamos su estado con un recorrido por los alrededores de Santiago y comprobamos que es un auto con muy pocos ruidos, con una excelente estabilidad y que en prestaciones no tiene que envidiarle a los Serie 3 actuales.