MITSUBISHI MONTERO SPORT

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UN VIEJA ESCUELA MODERNIZADO

Un verdadero todo terreno, con capacidad para 7 personas y un equipamiento de primera.

La tendencia mundial entre los fabricantes de SUV, es hacerlos refinados, espaciosos con muy buena capacidad para circular en carretera y algo extra que permita un uso todo terreno, que en algunas ocasiones se convierte en un todo camino, ya que al primer obstáculo real, tiran la toalla.

Mitsubishi cuenta dentro de su plataforma de modelos con uno que rompe ese molde y nos regresa a lo que fueron los orígenes de los SUV, más concretamente al Montero de los años 80, con un vehículo con capacidad para sacarlo del camino y llevarlo a lugares recónditos.

Para eso se necesita un vehículo tipo «vieja escuela», es decir con chasis independiente, basado en un pick up, en este caso el L-200.

Este fue el modelo que estrenó el nuevo lenguaje de diseño de la marca, llamado escudo dinámico, con un frente con muchos elementos cromados y un lateral con líneas marcadas y una marcada sensación de solidez. Atrás el diseño es radical, especialmente en lo que se refiere a las lámparas. Dejando la parte estética y yéndonos hacía lo práctico, la forma de la parte trasera, que al contrario de sus competidores principales no tiene un deflector en el techo, crea bastante turbulencia atrás con lo que sobre caminos de tierra es difícil mantener limpio el portón trasero.

Aunque hay versiones más sencillas, hoy probamos la versión más equipada, que incluye la tapicería de cuero y el máximo de equipamiento.

El conductor encontrara rápido una buena posición de manejo, gracias a ajustes eléctricos para su asiento y un timón que se ajusta en altura. Frente a él, un cuadro de instrumentos, con dos relojes y el centro de información en el medio.

El tablero es bastante tradicional, con una pantalla central, que incluye además del equipo de sonido y la conexión con el celular, un sistema de cámaras, con una vista de 360 grados, donde podemos cambiar la vista grande, ya sea hacia adelante o atrás. Bajo la pantalla los controles del aire acondicionado dual, aunque sobre la segunda fila de asientos también tenemos un control para el abanico.

El Montero Sport cuenta con tres filas de asientos, donde la tercera va guardada y permite tener un buen espacio de carga plano, cuando no se usan. La fila central tiene buen espacio para piernas, hombros y cabeza, con el respaldar que puede inclinarse levemente.

La tercera fila se despliega por partes, primero el respaldo y luego la base y para guardarlo, en sentido contrario, usando unos tiradores. El acceso a la tercera fila es algo incomodo, debido a que el auto es muy alto, pero con la ventaja de que el asiento se pliega con un solo movimiento.

El espacio atrás es más apropiado para niños, aunque un adulto de mi tamaño no toca con la cabeza en el techo.

El motor es un turbo diesel de 4 cilindros, con 2.4 litros de cilindrada y 178 HP. Es un motor que empuja desde bajas revoluciones, que además es bastante silencioso y de bajo consumo. Solo una transmisión automática de 8 velocidades está disponible en nuestro país. Transmisión que puede manejarse en modo manual mediante unas levas tras el timón.

Al ser un vehículo con chasis independiente, tenemos una mayor capacidad para circular fuera de carretera, que en otros SUV. Si a esto le sumamos la experiencia de Mitsubishi con sistemas de doble tracción, tenemos un vehículo muy capaz para un uso sobre caminos de tierra y lugares donde la palabra camino es una utopía. Una perilla giratoria en la consola controla el sistema de doble tracción Super Select 4WD-II, que ofrece un diferencial central y uno trasero bloqueable.  Cuenta con cuatro modos de manejo, el 2H para carretera, el 4H para tierra o lluvia, el 4HLc para arena y el 4 Llc para lodo y rocas. Un botón adicional permite ajustar la suspensión sobre estos dos últimos modos, mientras otro ajusta la velocidad de descenso en pendiente y tenemos un extra en el sistema de ascenso de pendientes.

Con suspensión independiente adelante y eje rígido con múltiples brazos atrás, tenemos una buena sensación de confort y suavidad sobre caminos en mal estado. Por su altura al piso y el largo recorrido de suspensión se podrá pasar por lugares no aptos para otro tipo de SUV y si a esto sumamos la capacidad del sistema de doble tracción y la fortaleza del vehículo, este nos llevará a cualquier lugar que decidamos, pudiendo mantener un buen ritmo de viaje, en la mayoría de situaciones. Sobre asfalto, todas esas ventajas fuera de carretera, se convierten en una marcha suave, que permite mucha inclinación de la carrocería en curvas, pero una vez nos acostumbremos a ello, nos daremos cuenta de que, el Montero Sport tiene buena estabilidad y que antes derrapa que levantar alguna rueda.

La dirección es suave, precisa y con un corto radio de giro, mientras que los frenos tienen grandes discos en todas las ruedas con asistencia ABS y EBD.

Esta versión cuenta con una serie de elementos de seguridad, adicionales a las cámaras de las que ya hablamos y a 7 bolsas de aire, uno de ellos es un indicador de punto ciego, que puede complementarse con una vista lateral en la pantalla. Tiene también control electrónico de tracción y de estabilidad, un sistema que permite estabilizar el remolque en caso de que lo usemos y un sistema ultrasónico de frenado automático, que actúa si el vehículo considera que estamos a punto de chocar. Este sistema, al igual que el de punto ciego, pueden desconectarse mediante un botón.

Este es un auto que convence una vez lo manejamos, con una solidez que sorprende, un motor eficiente, un sistema de tracción a prueba de todo, mucha seguridad y un precio inferior al de sus competidores directos. Si lo que busca es todo eso y necesita espacio para 7 y poder conjugar un uso tanto sobre asfalto como todo terreno, esta es una perfecta opción[ess_grid alias=»MITSUBISHI MONTERO»]