VOLKSWAGEN TYPE 1

RECUERDOS DE INFANCIA
Tras un año de restauración, este Tipo 1 regresa al esplendor que tenía en 1965, cuando salió de la fábrica en Alemania.
La historia de Volkswagen es bastante conocida y se remonta a 1933, cuando Hitler encargó a Ferdinand Porsche que diseñara un auto popular que pudiera llevar a 4 adultos a 100 km/h y que pudiera recorrer 14 kilómetros con un litro de gasolina.
El vehículo una vez terminado aportaba una serie de innovaciones como chasis tipo plataforma, motor enfriado por aire y suspensión independiente en las 4 ruedas. En 1937 se empezaba a construir la fábrica pero apenas se empezaban a fabricar las primeras unidades estalló la Segunda Guerra Mundial. Al terminar la guerra, los aliados ponían a funcionar la economía alemana y una de las primeras cosas que lograron arrancar fue la producción del Tipo 1, que era el nombre oficial del Volkswagen, que en América Latina se le conoció como Escarabajo, por su forma.
El auto se fabricaría con su forma con muy pocos cambios hasta el 30 de julio de 2003, cuando el último Escarabajo salía de la planta de Puebla, con lo que ha sido el modelo con mayor cantidad de años en producción en el mundo y también uno de los más vendidos.
Para 1965 el Tipo 1 ya había sufrido bastantes cambios con respecto al original y se había modernizado en muchos aspectos. El motor de 1.1 litros y 31 HP, había subido su cilindrada hasta los 1,300 y la potencia había llegado a los 40 HP. Los vidrios habían crecido en tamaño y el interior había mejorado un sinnúmero de detalles. Para esa fecha ya se habían vendido más de 8 millones de unidades en todo el mundo.
El cambio de motor hizo una gran diferencia y ayudó a disparar las ventas que ese año superaron el millón de unidades. Esto hizo replantear una serie de esquemas en Volkswagen que pronto aumentó nuevamente la cilindrada a 1,500 para dejarla a partir de 1968 en 1,600 cc.
El auto que engalana estas páginas, llegó de Alemania y se vendió en Chiriquí, donde pasó toda su vida. Como solo estuvo en manos de dos familias, tuvo una vejez relativamente buena y cuando lo pusieron en venta hace poco más de un año, estaba en buen estado de funcionamiento. Un propietario de Volkswagen chiricano, le pasó el dato a un capitalino, que ya había tenido uno, pero que quería volverlo a tener, pues en su infancia su padre había tenido varios Escarabajos. El chiricano le aseguró que conocía el auto de muchos años y que era una buena compra. El negocio se cerró en David y su actual propietario, se lo trajo manejando a la Capital, luego de haberle revisado frenos y comprado una batería nueva.
En el taller Pasión por los autos se procedió a hacer una revisión a fondo del auto y empezaron las sorpresas. El oxido había atacado gran parte de los pisos del auto, que tenía una mezcla de repuestos de diferentes años, algo muy normal en vehículos que han tenido un uso constante y cuyo motor necesitaba una renovación a corto plazo. La carrocería se desarmó del chasis y empezaron dos procesos al tiempo, por un lado devolver la fortaleza del chasis con pisos nuevos y el cambio de todas las piezas de suspensión y frenos y por otro restaurar la carrocería a su estado original. La lista de partes necesaria era larga, pero afortunadamente para el Tipo1, hay muchas empresas que venden piezas y con paciencia e Internet se consigue de todo.
El chasis se hizo nuevo y la carrocería se dejó al metal, se procedió a cambiar las partes oxidadas y a reparar los golpes, que no eran muchos. Una vez la carrocería estuvo perfecta se procedió a pintarlo en un color de la paleta original de colores de Volkswagen para esa época y se procedió a rearmar todas las partes, con gran cantidad de repuestos nuevos. La tapicería se pidió nueva, así como alfombras, cielo raso y gran cantidad de accesorios interiores.
La parte mecánica fue lo final, reconstruyendo el motor y poniendo, gran cantidad de piezas nuevas. El detalle final fue comprarle los rines originales, pero cromados y un poco más anchos, para luego montarle llantas de banda blanca ancha.
Tras un año de trabajo, el Tipo 1, recuperó su esplendor original en unas condiciones que según muchos conocedores, son mejores que cuando dejó Wolfsburg[ess_grid alias=»VOLKSWAGEN TYPE 1″]